20 mar 2009

Recuerdos oxidados

Estaba a punto de acostarme, pero una inexplicable curiosidad me picó y terminé revisando mensajes del pasado, ya sea de mi correo o de mi celular. Debí haber borrado todo eso, pero no lo hice justo para una situación como la que vivía en ese instante. Creo que deseaba este momento, revivir viejos textos, antiguas anécdotas y mensajes melosos y empalagosos (llenos de cariño). Pensé que dolería, pero no fue así. Leía con orgullo, meditando y sonriendo a cada momento. Pensaba: "Esos tiempos..."

Fue placentero, divertido y muy emotivo, pero con poca añoranza (que vuelva a repetirse lo que viví con la misma persona no era ya un deseo profundo). Obviamente, luego de revivir tantas cosas, trajo sus consecuencias en mi descanso nocturno.

Alucinaba que mi pasado parecía la muerte que regresaba con una hoz para rasgar la capa que cubría mi estado emocional. La hoz cortó todo lo que pudo, hiriendo también mis emociones, pero yo logré salir intacto, aunque sintiéndome impávido. El pasado se asustó y desapareció ante tal frivolidad. No me inmuté, yo estaba allí parado, sin sentir nada.

¿Soy ahora impávido? No lo creo.

*~*~*

Lo que no puedo hacer:

No podré recostar mi cabeza sobre tu pecho.
No podré deleitarme con tus besos.
No podré juntar tus manos con las mías
(porque si lo hiciera, no te dejaría).

No hay comentarios: