26 ago 2009

Noche con o sin estrellas

Extiendo mis alas bajo la noche.
Sonrío y despego con un simple impulso.
Sin esfuerzo puedo tocar las estrellas.
Puedo moverlas y entregártelas.

Si llegas,
si me alcanzas,
no te soltaré.

Puedo tocar las estrellas,
puedo acomodarlas y dártelas.
Puedo sonreír y darte la espalda.

La verdad de la mentira,
las lágrimas, las risas,
las manos que tocan el vacío.
Alas, viento, cielo,
estrellas, siluetas, ojos.

Si llegas,
si me alcanzas,
si me invades,
no te soltaré.

Despego desde las estrellas,
salto de sueño en sueño,
me acuesto con mi locura,
respiro en mi refugio,
me sonrío y te sonrío.

A las orillas de mis sueños,
en el umbral de la oscuridad,
desde lo más profundo,
baja una noche con o sin estrellas,
te veo, te sonrío, te extiendo mi mano.

22 ago 2009

Recuerdos de niño antes de empezar la función

Antes de la función de mi obra de teatro (una para niños), nuestra directora nos dispuso un ejercicio un tanto diferente. Mientras caminábamos con expresividad sobre el escenario, ella nos dio ideas y situaciones para que comenzáramos a revivir momentos de nuestro pasado, estábamos siendo introducidos a nuestra infancia y teníamos que recordar cómo nos comportábamos.

La directora nos propuso algunos momentos, como cuando jugábamos con nuestros amigos o hermanos (recordé y "actúe" mi propio yo de niño jugando a ser Gokú lanzando su Kame-kame-ha), cuando íbamos al baño (siendo niños), cuando lloramos como nunca (reviví aquella vez que mi madre preparó una torta que se supone ambos haríamos, por lo que hice un berrinche y boté el pastel al suelo, lo pisé y lloré), etc. Lo curioso es que no estaba solo, era un trabajo grupal y puede comprobar que había tenido una "mejor" infancia comparada con las situaciones que mis amigos y compañeros de trabajo revivían, eran... más trágicas.

Luego la directora nos indicó que siendo niños nos encontráramos y jugáramos a las escondidas. Yo, siguiendo mi comportamiento de niño, fui más reservado y un poco torpe, lento de reaccionar y pasivo. Los otros compañeros eran niños vitales, yo prefería leer antes que salir al recreo a jugar. Me sentía verdadero, me comportaba como yo era, y como creo que sigo siendo. Fue una experiencia interesante.

Finalmente, tuvimos que volver a la realidad lentamente. Uno de mis compañeros le costó y casi se pone melancólico luego del ejercicio, pero debíamos controlar nuestras emociones, esa era la idea. Comenzó la función y, gracias a diversos factores, nuestra obra para niños salió mucho mejor que el mismo estreno. Terminé contento y dispuesto a jugar más en escena.

12 ago 2009

¿Distractor?

Quiero escribir. Luego de varios meses me acomodo en mi asiento y vivazmente presiono cada tecla para formar palabras y frases, sin importarme si existe coherencias o no. Solo deseo escribir, escribir mientras mi mente se llena de ideas, sin saber de qué hablar o de qué reflexionar. Solo presiono las teclas, no me importa nada más...

[1]
Ella, mi compañera de acción, estaba echada, con sus brazos cubriendo sus ojos y al parecer con sueño. Estábamos solos, y esa actitud me sugería muchas cosas, pero quise ir lentamente. Le robé un beso, ella sonrió y solo me preguntó "¿qué has hecho?"
"Robarte un beso..." le contesté. Nos quedamos mirando, felices, y salí sin nada más que decir, contento por dentro y asombrado, realmente impresionado.

[2]
Comenzamos a fastidiarnos. Mientras nos reíamos, nos fuimos acercando e inevitablemente nuestros labios se juntaron. Quise continuar pero ella se apartó. Volví a la realidad y me di cuenta que estaba rodeado por compañeros... al parecer nadie se dio cuenta.

[3]
Al día siguiente y los demás no pasó absolutamente nada, no hicimos nada, no intentamos ni sugerimos nada. Conforme pasaba el tiempo más indiferente nos volvíamos. Hasta que nuestros saludos fueron gélidos y comencé a preocuparme. Hasta el día día seguimos siendo frios.

[4]
Es alucinante, no había vivido esto. Parece que solo hubiese sido un "choque", nada pasó aquí. No nos buscamos, no nos necesitamos, pero cuando hay ocasión, vivimos. Pero parece que no hay oportunidad ahora, ¿o ella ni le interesa?. ¿Y qué? No la deseo, no necesito sus besos, no... no quiero creer que la necesito. Necesito creer que esto es diferente, una justificación para creer que no estoy pasando algo que ya antes viví.

[5]
Tomalo con calma.
No pasó nada.
Sí pasó...
¿Te besé y te dejé? Jajajaja...
Hombre, prioriza...
Que no se vuelva... ¿un distractor?